Santo Domingo.-El padre Rogelio Cruz aseguró este viernes que la destitución del arzobispo Monseñor Francisco Ozoria por presuntas irregularidades administrativas revela un caso de tal magnitud económica que “no podía resolverse en el país” y forzó la intervención directa del Vaticano.
“Cuando un caso llega desde el Vaticano es porque no estamos hablando de cinco cheles, sino de recursos que debieron destinarse a un proyecto social. La magnitud del hecho es tan grande que aquí no se podía resolver”, dijo durante una entrevista en el programa Matutino Su Mundo.
Rogelio afirmó que, aunque la investigación estuvo años en curso, no espera consecuencias importantes a nivel local porque según afirmó “ese es el modus operandi dentro de la Iglesia Católica, donde el obispo manda y los demás deben callar”. Recordó que el propio Ozoria habría reconocido que su hermano administraba recursos y lo acompañó en distintas diócesis, lo cual, a su juicio, evidencia fallas internas en los sistemas de control.
“Lo que uno siembra es lo que cosecha”
Al ser cuestionado sobre su valoración del caso, el sacerdote afirmó que Ozoria enfrenta las consecuencias de su propio manejo institucional.“Lo que uno siembra es lo que cosecha. Fue desafortunado en sus expresiones y en buscar enemigos dentro de la Iglesia”, afirmó.
Rogelio añadió que este caso expone no solo la conducta del exarzobispo, sino también “la situación actual de la Iglesia Católica”, que a su juicio opera con hermetismo y desconexión de las exigencias del mundo moderno.
Investigación del Vaticano tomó años
Cruz reveló que la Santa Sede llevaba entre dos y tres años realizando la investigación en el país, y que la falta de transparencia evitó que el proceso saliera a la luz antes.
“El Vaticano tenía tiempo investigando, pero la Iglesia quiere seguir manejándose con un hermetismo imposible en un mundo globalizado”, afirmó.
Críticas al Concordato y manejo de recursos
El sacerdote también cuestionó la falta de rendición de cuentas sobre los fondos que recibe la Iglesia Católica a través del Concordato.
“Es una institución que recibe millones del Estado y nadie conoce un informe administrativo, es un hermetismo total. . No hay seguimiento ni régimen de consecuencias”, señaló.
Afirmó que recursos destinados a construcción de templos, colegios o compra de vehículos se manejan sin transparencia suficiente: “Es echar a un saco sin saber qué entra ni cómo lo sacan y no hay mecanismos de seguimiento. Eso es insostenible”, expresó.
Rogelio comparó la disciplina interna con otras órdenes, asegurando que en algunas congregaciones sí se exige un informe mensual de gastos, mientras que a nivel diocesano “se reciben los recursos y después cada cual hace y deshace sin régimen de consecuencias”.
Nueva diócesis y designación de Manuel Ruiz
Rogelio consideró necesaria la creación de la nueva diócesis en Santo Domingo debido al crecimiento poblacional, pero criticó la elección del obispo designado, Manuel Ruiz, a quien atribuyó “diabluras históricas” y falta de respaldo dentro del clero.
“Ruiz no es querido en el clero. Tendrá que iniciar por reconciliarse con su propio equipo”, expresó.
Recordó también su historial de conflictos internos y controversias relacionadas con proyectos sociales. “Muchas cosas solo fueron cubiertas por la protección del cardenal”, afirmó.
Mensaje al nuevo arzobispo
Sobre la reciente designación de Carlos Tomás Morel Diplán, Rogelio le deseó acierto en su gestión y le exhortó a acercarse a las comunidades más vulnerables.
“Que se ponga los pantalones, que busque la unidad y vaya a los barrios marginados. La arquidiócesis merece más de lo que ha recibido en los últimos años”, concluyó.
