El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, manifestó este lunes que espera que a principios de la próxima semana pueda entrar en vigor un cese del fuego entre Israel y Hamas que pause las hostilidades y permita la liberación de rehenes.
Cuando se le preguntó cuándo esperaba que se cerrara el acuerdo, Biden respondió: “Espero que a principios del fin de semana. Al final del fin de semana. Mi asesor de seguridad nacional me dice que están cerca. Están cerca. Aún no han terminado. Mi esperanza es que para el próximo lunes tengamos un cese del fuego”.
El asesor de Seguridad Nacional de Biden, Jake Sullivan, ya había avanzado este domingo en una entrevista que Estados Unidos, Israel, Egipto y Catar habían alcanzado un acuerdo sobre “las líneas básicas” para facilitar un alto el fuego en la Franja de Gaza y el intercambio de rehenes israelíes por prisioneros palestinos.
Biden hizo el comentario mientras visitaba una heladería neoyorquina, con cono de chocolate y menta en mano.
Poco antes, un grupo de manifestantes se congregaba en el centro Rockefeller, donde Biden acudió hoy a grabar una entrevista con el presentador, para protestar contra la guerra en Gaza y pedir un alto el fuego.
Este lunes, fuentes cercanas a las negociaciones en Doha entre delegaciones de Qatar, Egipto, Estados Unidos, Israel y el grupo islamista palestino Hamas dijeron que las conversaciones están “avanzando” para acordar un intercambio de rehenes en Gaza por presos palestinos.
Una fuente palestina desde El Cairo, bajo anonimato, que estas negociaciones “han generado grandes avances” para alcanzar “una base sólida” sobre el intercambio de rehenes en manos de Hamas por presos palestinos en cárceles de Israel.
Asimismo, apuntó que una vez se llegue a un acuerdo sobre este asunto se empezaría a negociar una posible tregua en la Franja de Gaza, donde desde el pasado 7 de octubre han muerto casi 30.000 personas como consecuencia de la campaña militar de Israel desencadenada tras el ataque cometido ese mismo día por el grupo terrorista contra territorio israelí, en el que murieron unas 1.200 personas y otras 230 fueron secuestradas.
De su parte, una fuente cercana a Hamas dijo que las reuniones de Doha están centradas en identificar a los rehenes israelíes y a los presos palestinos que deben ser liberados, así como las condiciones para un alto el fuego y el retorno paulatino de los gazatíes al norte de la Franja.
La reconstrucción de Gaza y el establecimiento de campamentos para acoger a casi la totalidad de la población de Gaza que ha sido desplazada por la guerra son otros de los puntos que están sobre la mesa en estas negociaciones, indicó otra fuente palestina cercana a las reuniones de Doha que pidió el anonimato.
La fuente indicó que los avances logrados hasta el momento han sido posibles gracias a que Hamss “abandonó su exigencia de un alto el fuego permanente” a cambio de la liberación de los rehenes, pero con la condición de implementar una tregua de seis semanas durante la cual las conversaciones para detener la guerra empiecen “lo antes posible”.
Según estas fuentes, Israel está mostrando “más flexibilidad” respecto al número de presos palestinos que están cumpliendo condenas largas y que serían liberados a cambio de los cautivos en la Franja de Gaza.
Las reuniones de Doha se están llevando a cabo por grupos de “expertos y altos funcionarios de seguridad” y son de carácter técnico, de acuerdo con los informantes, que recordaron que durante el fin de semana tuvieron lugar en París encuentros entre los jefes de Inteligencia de Qatar, Egipto, Estados Unidos e Israel.
Desde que comenzó la guerra, Israel y Hamas solo lograron un acuerdo de tregua de una semana a finales de noviembre, que permitió liberar a 105 rehenes a cambio de 240 presos palestinos.
