Erickson Brens Rosario, presentó este martes su testimonio ante los jueces del Primer Tribunal Colegiado del Distrito Nacional, en una audiencia en que fungió como testigo de descargo en el supuesto entramado de corrupción denominado ”Caso Coral” y ”Coral 5G”.
Durante su intervención, Brens, quien trabajó en el Departamento de Nóminas del Cuerpo Especializado en Seguridad Turística (Cestur) desde 2015 hasta 2021, reveló información sobre la forma en que funcionaba el esquema de manejo ilícito de fondos.
Según sus declaraciones, trabajaba bajo la supervisión directa del mayor Raúl Alejandro Girón, así como de los coroneles Rafael Núñez de Aza y Jeury Vladimir Guzmán, señalando, además, que el departamento financiero incluía a David Abreu, Miguel Cancún, Manuel Rosario Pirón, Jacobo de la Cruz, entre otros.
El testigo detalló que sus responsabilidades estaban ligadas a la recolección de dinero de nóminas.
“Nosotros recolectamos el dinero. Cuando se pagaba la nómina, había personal asignado para recolectarlo, y ellos depositaban una cantidad de entre 15 y 35 mil pesos, de la cual debían devolver una parte”, afirmó.
Hasta dos millones de pesos desviados cada mes
Según sus declaraciones, cada mes se recolectaban hasta dos millones de pesos, siendo diciembre el mes de mayor cantidad.
Asimismo, reveló que el dinero recolectado era entregado a Girón, quien luego se encargaba de realizar un cuadre final para entregárselo a Núñez de Aza en su domicilio. Brens recordó que, en una ocasión, entregó personalmente 100 mil pesos a la pastora Rossy Guzmán en la avenida Ortega y Gasset, luego de que ella enviara a otra persona a recibir el dinero.
Al profundizar sobre el manejo de nómina en Cestur, Brens afirmó que el personal cambiaba mensualmente y que ninguno de los empleados cumplía realmente con las funciones asignadas. El testigo también mencionó reuniones convocadas por Núñez de Aza para dar instrucciones sobre tareas adicionales.