Santo Domingo.- El proyecto de nacionalización de la mano de obra en el sector de la construcción, presentado por la Asociación de Constructores y Promotores de Viviendas (Acoprovi) con el respaldo del gobierno dominicano, ha generado reacciones encontradas entre los legisladores.
La iniciativa, promovida a través de la plataforma Construyendo RD, busca impulsar la dominicanización de la fuerza laboral en este sector. Sin embargo, mientras algunos legisladores la apoyan, otros han expresado reservas y críticas.
La diputada Mercedes Ortiz destacó la importancia de apostar por esta medida a largo plazo, aunque recordó que la ley migratoria establece un plan de regularización al que deben adherirse tanto los empresarios como los trabajadores migrantes. “Tenemos una ley migratoria clara y una política establecida; los empresarios deben sumarse al plan de regularización”, puntualizó.
Desde el oficialismo, además del respaldo al proyecto, varios senadores y diputados han señalado la necesidad de regularizar a los trabajadores haitianos indocumentados que desempeñan labores tanto en la construcción como en la agricultura.
Por su parte, el vocero de los diputados de la Fuerza del Pueblo, Rafael Castillo, cuestionó a la empresa encargada del plan debido a su posición previa contra las deportaciones. Sin embargo, su colega Carlos De Pérez respaldó la dominicanización de la mano de obra y abogó por mejores condiciones salariales como incentivo para atraer a los trabajadores locales.
El principal motor detrás de este proyecto es mitigar el impacto negativo que las deportaciones masivas han tenido en el sector construcción, uniendo esfuerzos entre el gobierno y los empresarios para incentivar la participación de trabajadores dominicanos en este oficio.
