SANTO DOMINGO, R.D.– El viernes 04 de noviembre la República Dominicana sufrió la mayor cantidad de lluvia de los últimos 40 años y todo esto a modo de sorpresa, tras su paso dejó un saldo de 09 víctimas mortales, varios desaparecidos, personas sin vehículos u otros bienes materiales.
Se tiene un estimado de que la cantidad de lluvia que flujo ese día ronda 236 milímetros de agua y esta puede variar según el punto del país, lo cual era notorio en las crecidas de arroyos, cañadas y ríos.
En una búsqueda encabezada por miembros de la Defensa Civil y el Cuerpo de Bomberos del Distrito Nacional (DN), a una semana de la gran inundación que sufrió la ciudad de Santo Domingo, encontraron los cuerpos de José Antonio Batista Polanco “Jochy” y Luisinky Jiménez, en el río Isabela, ambos casos consternaron al pueblo dominicano.
A su vez, encontraron en el río Ozama el cadáver del señor Fernando Arturo Ramírez Almonte de 60 años.
Vehículos ahogados o chatarra
Otros que continúan afectados son los dueños de vehículos, sin importar su clasificación, al momento muchos aún no reciben el apoyo de sus aseguradoras por los daños que presentan, los cuales van desde la fundición de un motor hasta el remolque de lo que se quedaron sin combustible en medio de las largas horas de taponamiento producidas por el mal clima.
Hasta hace pocos días un medio local reportaba que la Cámara Dominicana de Aseguradores y Reaseguradores (Cadoar) tienen registradas 500 reclamaciones de propietarios de vehículos de motor que sufrieron daños ocasionados por las inundaciones del pasado viernes en la ciudad Capital y que esperaban estos continuaran llegando.
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A su vez, los representantes de las diversas aseguradoras realizaron un llamamiento a sus clientes recordando los límites y parámetros de la cobertura de sus pólizas de seguro.
Hogares y comercios
De los primeros videos que comenzaron a circular en redes sociales e impactaron a sus observadores y curiosos, se encontraba las condiciones y niveles de agua en el parqueo de RCC Media Group, del cual sus talentos y trabajadores no lograban salir del lugar.
Sectores como Arroyo Hondo, Cuesta Hermosa, los Ríos, entre otros, aparte de la total sumergida de sus casas en agua y el fallecimiento de un guardia de seguridad en funciones, al ser aplastado por una pared colapsada, también sufrieron daños eléctricos.
Los estudiantes de las diferentes altas casas de estudio del país reportan por redes sociales como estas sufrían colapsos en sus estacionamientos, aulas e incluso salones de conferencias, de los más afectados fueron Universidad Pedro Henríquez Ureña (Unphu), Universidad Acción Pro Educación y Cultura (Unapec), Instituto Tecnológico de Santo Domingo (Intec) y la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (Pucmm).
Por su parte, la Alcaldía del Distrito Nacional desplegó sus unidades en colaboración con los ciudadanos, unos criticaban como se manejó esta parte, más otros se mostraron en favor del accionar de la alcaldesa Carolina Mejía.
“Ella esperó lo último para querer resolver, pero no se le puede culpar de todo a ella porque el dominicano le hace falta educación ciudadana, muchas calles llenas de basura y gente que en medio del “corre, corre”, uno los veía sacando más hacia afuera, eso es inconcebible”, narró Arturo Martínez, residente en Arroyo Hondo.
Otros se tomaron los cambios de la madre, naturaleza con humor y salieron en jocosos videos utilizando remos para supuestamente salir a las calles o fotos de todos los tapones, vehículos varados y personas cuyo combustible se acababa con la canción “Santo Domingo” de Manny Cruz.
Tras una semana la población dominicana sigue viviendo a menor o mayor escala los estragos de esta lluvia inesperada para muchos.
