Madrid (EFE).– El exjefe de comunicación de la Federación de Fútbol Pablo García Cuervo ha asegurado que Jenni Hermoso dio el «ok» al comunicado difundido en su nombre en el que «quitaba hierro» al beso que le dio Luis Rubiales, y ha dicho que él no quiso pedirle grabar un vídeo porque no se fiaba de que cambiara de opinión.
«Yo no me fio de la señora Hermoso y dije que ya no iba a hablar más de este tema cuando ya tenía atado el comunicado», ha expuesto en su declaración como testigo durante un tenso interrogatorio ante la fiscal Marta Durántez, que ha querido saber por qué no se fiaba de la jugadora.
«Es bastante influenciable y bastante manipulable»
El motivo, ha dicho, es que Hermoso «es bastante influenciable y bastante manipulable», momento en que el juez de lo Penal de la Audiencia Nacional, que juzga estos hechos, le ha pedido que no continuara calificando a la jugadora, a la que García Cuervo ha responsabilizado de su despido de la RFEF en octubre de 2023 por firmar un escrito solicitando su salida con otras jugadoras.
De hecho, el magistrado ha reprendido en más ocasiones a este testigo, al que ha advertido, ya a gritos, que quería «saber las cosas con claridad, no con chulería» después de que García Cuervo le recriminara a la abogada de la AFE, María José López, que le estaba interrogando en ese momento, que no se hubiera preparado «el juicio».
El comunicado y el «ok» de Hermoso
Durante su declaración, García Cuervo ha explicado que el comunicado remitido a algunos medios se elaboró a partir de las declaraciones que había hecho horas antes Hermoso, «libremente» y «sin coacciones», a la cadena Cope, en las que «quitaba hierro» al asunto del beso en la boca que le dio Rubiales tras ganar el Mundial en Sídney .
«Libremente cojo esas declaraciones porque considero que son importantes sobre su postura», ha defendido el testigo, que ha relatado que tras redactar el comunicado él se lo leyó a Hermoso y esta le preguntó si tenía que hacer un vídeo «con eso».
Él la dijo que no, que si daba el «ok» difundían ese comunicado, y ella dijo «vale, que ok», pero que no iba hacer nada más «sobre ese tema». Ayer la jugadora no dijo que diese su aprobación, sino que manifestó, con hartazgo, «haced lo que queráis».
García Cuervo ha reconocido que cuando Hermoso bajó del autobús para leerle el comunicado lo hizo «con cierta desgana», pero ha insistido en que «dio el ok» y «como dijo que sí, se sacó adelante, si hubiese dicho que no, no se hubiese sacado».
El comunicado, ha dicho lo escribió bajo la supervisión de Rubiales, a quien se lo enseñó antes, si bien la fiscal le ha recordado que cuando declaró ante el juez de instrucción dijo que lo redactó «a medias» con el presidente.
«Es básicamente lo que he dicho», se ha defendido.
Reprimenda del magistrado
También ha aludido a una reunión celebrada el 25 de agosto en el despacho de Rubiales, que se prolongó desde las 9 de la mañana hasta las 11 de la noche, con el objetivo de gestionar «una situación de crisis».
Leer también: Los explosivos chats del ‘narcodiputado’ asesinado en Paraguay
«¿Qué situación es esa?», le ha preguntado la fiscal. «Pues la situación por la que estamos aquí», ha contestado con un tono algo desafiante, una respuesta que le ha valido otra reprimenda del magistrado: «Hable en castellano, sin eufemismos. Por el beso».
Declaración de García Caba
Antes que él ha declarado el exresponsable de Integridad de la Federación Miguel García Caba, cesado en septiembre de 2023 y que también integraba el círculo de confianza de Rubiales.
García Caba elaboró el informe interno de la Federación sobre lo ocurrido, que se cerró sin ninguna consecuencia para el expresidente, y que él ha calificado de «provisional» y «no vinculante». Según él, buscaba «esclarecer los hechos» y dirigirlos, si era necesario, a los órganos competentes.
En contra de lo que sostiene la Fiscalía, García Caba ha manifestado que aquel informe -elaborado por orden del anterior secretario general, Andreu Camps,- no fue favorable para Rubiales y ha negado que proporcionase las preguntas y respuestas por adelantado a los que intervinieron.
El testigo, que ha subrayado que intentó contar con el testimonio de Jenni Hermoso pero ella declinó y que no recibió órdenes de Rubiales, ha sugerido que su salida se debió a que su informe «no debió gustar en algún lugar», y ha insistido en que hizo lo que pudo en el «día o día y medio» que tuvo para elaborarlo.
Declara también Luis de la Fuente
Está previsto que declare también en al sesión de este martes el entrenador de la Selección masculina, Luis de la Fuente.
De la Fuente, renovado hasta 2028 al frente del combinado masculino, es uno de los cinco testigos previstos en el juicio en el que Rubiales comparte banquillo con el ex director deportivo de la selección masculina Albert Luque, el exentrenador de la femenina Jorge Vilda y el exjefe de marketing de la RFEF, Rubén Rivera.
Los cuatro están acusados de coaccionar a Jenni Hermoso para que justificase el beso que le dio Luis Rubiales tras la final del Mundial en Sídney el 20 de agosto de 2023, y por el que la Fiscalía le acusa de agresión sexual.
Tras escuchar el lunes a la jugadora, que ratificó que no aprobó aquel beso y que se sintió presionada para restarle importancia, el juez José Manuel Fernández-Prieto recabará a petición de la Fiscalía la versión de varios cargos, presentes y pasados, de la Federación.
Previsiblemente, la jornada se centrará en las gestiones promovidas desde el departamento de Comunicación para sacar un comunicado tras lo sucedido y en el informe del comité de Integridad de la RFEF, que se cerró sin ninguna medida para Rubiales.
Declaración de Patricia Pérez
Sobre esto último, la responsable de prensa de la Selección femenina, Patricia Pérez, declaró el lunes que Enrique Yunta le llamó para que aportase su testimonio a dicho informe, si bien «para agilizar los tiempos», le dijo que le enviaba las preguntas y las respuestas que debía dar.
Al llegar a la Federación, entró a un despacho y encontró a ocho personas, entre las que no estaba el responsable de Integridad. Eran Rubiales, su padre, su jefe de gabinete, «un amigo íntimo de la infancia», y cuatro de los citados: García Cuervo, Enrique Yunta, Javier López Vallejo y Luis de la Fuente.
Pérez también indicó que era «era García Cuervo quien tomaba las decisiones» y manifestó que fue él quien redactó un comunicado en boca de la jugadora que «intentaba rebajar la magnitud» de lo ocurrido a «algo anecdótico», y sobre el que ella acabó diciendo: «Haced lo que queráis».