El huracán Francine, actualmente clasificado como categoría 1, avanza lentamente desde las costas de Texas hacia Luisiana, con un impacto previsto para la noche del miércoles. El Centro Nacional de Huracanes (NHC) reporta que Francine, que se encuentra a unos 300 km al este de la boca del Río Grande, Texas, está desplazándose hacia el noreste sobre el Golfo de México con vientos de 120 km/h y una velocidad de 17 km/h.
Se esperan marejadas ciclónicas peligrosas y vientos huracanados en Luisiana, donde se han llevado a cabo evacuaciones obligatorias en varias parroquias costeras. El NHC también ha emitido advertencias de huracán para Nueva Orleans y vigila el riesgo de marejadas ciclónicas en Misisipi, Alabama y Florida.
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El gobernador de Luisiana, Jeff Landry, ha establecido refugios de respaldo y la Guardia Nacional está preparada para intervenir. En Nueva Orleans, los residentes se preparan comprando suministros y se han instalado refugios temporales. Las autoridades locales advierten sobre la posibilidad de árboles caídos debido a suelos saturados por lluvias recientes.
El impacto de Francine se sentirá con mayor intensidad el miércoles y jueves, y se aconseja a los residentes y visitantes que se mantengan en casa y eviten las vías. Esta área ya ha sufrido daños de huracanes anteriores, como Katrina (2005), Laura (2020) e Ida (2021).
