Israel anunció que comenzará a retirar sus tropas del Líbano a partir de mañana, aunque mantendrá unidades desplegadas en cinco puntos fronterizos estratégicos.
Esta decisión se produce en un contexto de alta tensión, marcado por un reciente ataque aéreo israelí en Sidón, que resultó en la muerte de Mohammed Shahine, un comandante de Hamas acusado por las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) de planear atentados contra territorio israelí bajo dirección y financiamiento iraní.
“Israel permanecerá en cinco puntos clave que controlan las comunidades en el sur del Líbano y nuestras comunidades en la frontera”, declaró un portavoz de las FDI durante una conferencia de prensa virtual en la que participó Infobae.
El portavoz contextualizó la situación actual dentro de los 500 días de conflicto desde el ataque de Hamas del 7 de octubre, que dejó 1,200 muertes israelíes y la toma de rehenes, algunos de los cuales aún permanecen cautivos en Gaza “en condiciones horribles”. Además, reveló que Israel ha enfrentado aproximadamente 67,000 cohetes durante este período de hostilidades.
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La retirada forma parte de un acuerdo respaldado por Estados Unidos, que también contempla el repliegue de Hezbollah de la zona fronteriza, dejando al ejército libanés como la única presencia militar en la región. “Nos comprometemos plenamente a aplicar este acuerdo”, aseguró el portavoz de las FDI.
Sin embargo, el presidente libanés, Joseph Aoun, ha pedido a los mediadores internacionales que presionen a Israel para completar su retirada antes del plazo establecido, que vence el martes. Por su parte, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, fue claro durante una aparición conjunta con el
Secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, el domingo: “Hay que desarmar a Hezbollah. Israel preferiría que el ejército libanés hiciera ese trabajo, pero nadie debe dudar de que Israel hará lo que tenga que hacer para hacer cumplir los acuerdos del alto el fuego y defender nuestra seguridad”.
La retirada de tropas israelíes, aunque parcial, representa un paso significativo hacia la estabilización de la volátil región fronteriza, en medio de un frágil alto el fuego con Hezbollah. No obstante, la presencia continuada de Israel en puntos estratégicos y las tensiones subyacentes sugieren que la paz en la zona sigue siendo un objetivo complejo y delicado.
Fuente: Infobae
