La actriz Megan Fox habló por primera vez sobre su experiencia posparto siete meses después de dar a luz a su cuarta hija, Saga Blade, fruto de su relación con el músico Machine Gun Kelly (MGK). La actriz de 39 años se sinceró durante una proyección especial de Jennifer’s Body en el Museo de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas de Los Ángeles.
Fox reveló que la maternidad reciente le ha traído confusión mental y fatiga extrema. “Antes que nada, quiero decir que acabo de tener un bebé y tengo mucha confusión mental. No he dormido en siete meses”, comentó, entre risas y mostrando el cansancio que acompaña a su proceso de recuperación.
La actriz, madre de cuatro hijos, explicó que la falta de descanso ha afectado su concentración y que el posparto ha sido un desafío tanto físico como emocional. Sin embargo, reconoció que este periodo le ha permitido descubrir nuevas facetas de sí misma y reflexionar sobre el papel de las mujeres en la maternidad y en la industria del entretenimiento.
Durante el evento, Fox estableció un paralelismo entre su vida y su personaje en Jennifer’s Body, una adolescente sacrificada y transformada en un ser demoníaco. “Sentí que me perseguían en ese momento de mi carrera y estaba lidiando mucho con la fama; de hecho, me traumatizó”, señaló, haciendo referencia a las presiones que enfrentó desde su juventud en Hollywood.
La actriz añadió que la historia de su personaje le permitió interpretar simbólicamente su propia experiencia en la industria. “Antes de convertirse en un monstruo, es una adolescente sacrificada para el beneficio de otra persona. Y eso me impactó mucho, porque así es como entré en esta industria”, concluyó, reflejando la conexión entre su rol cinematográfico y los desafíos personales que ha enfrentado.










