El mercado dominico-haitiano reanudará sus actividades este lunes, luego de que secerrara la puerta de entrada entre el municipio Pedernales y la comunidad Anse-á-Pitre-Haití, por un incidente que entre un miembro del Cuerpo especializado en Seguridad Fronteriza (Cesfront) y varios haitianos.
Según informaciones, a partir de este 14 de agosto la puerta que se cerró hace dos semanas y que provocó dificultades económicas, se abrirá para permitir que los vendedores haitianos crucen al mercado fronterizo.
Sobre el altercado que provocó el cierre.
El pasado sábado cinco, el cabo Miguel Ángel Ferreras D’ Óleo, de la seguridad fronteriza, resultó herido de un machetazo en su mano izquierda y despojado de su arma de reglamento, una escopeta calibre 12 milímetros, cuando realizaba su servicio en la división y, presuntamente, unas mujeres de nacionalidad haitiana trataron de ingresar de manera ilegal.
De acuerdo a fuentes, la escopeta que le despojaron al militar se entregará por las autoridades del poblado de Anse-á-pitre-Haití este lunes o el martes, en la división con ambos lados.
El arma, según se ha establecido, se encuentra en manos del alcalde Herry Bruno, de la comunidad de Anse-á-pitre-Haití.
El cierre de la puerta paralizó el comercio libre de productos manufacturados, agrícolas, pasaportes, visados entre extranjeros y duplicó las devoluciones de indocumentados hacia el vecino país.
Comerciantes de ambos lados habían pedido a las autoridades ser más flexible al cerrar el portón de acceso, debido a que son muchos los pobladores del sur del país y oeste de Haití que sobreviven con el comercio que tradicionalmente se realiza entre ambas partes de la isla.
