Santo Domingo.- El obispo Ramón Alfredo de la Cruz Baldera, durante su visita a las instalaciones de Grupo Multimedios Su Mundo, realizó algunos resaltó los avances en la vida de la iglesia católica en el ejercicio del papa Francisco.
Afirmó algunos de los cambios que se han visto en este pontificado del Papa Francisco es una nueva forma de ser iglesia donde ya no está tanto puesto el acento en las estructura sino en la vida, la manera en que se relacionan dentro de la comunidad eclesiástica, cómo se vive el evangelio y también la apertura hacia los demás.
“Antes la iglesia era medio cerrada donde se hacía la diferencia entre los que estaban y los que no estaban, el Papa hoy dice que tienen que venir también los que no están, hay que buscarlos, no para que ellos sean como nosotros sino para que también vivan esa diferencia y nosotros seamos ejemplo de acogida”, manifestó.
El Obispo hizo énfasis en la diferencia que ha tenido el rol de los cardenales y obispos con el paso de los tiempos, quienes antes los consideraban príncipes, hoy ya no, el papa ha insistido mucho en que “todos somos servidores del pueblo de Dios, donde debemos crear el clima de mutua escucha y mutua acogida”.
Asimismo dijo que el papa da un ejemplo de humildad y sencillez resaltando que insiste continuamente en que él prefiere una iglesia accidentada por estar en la calle y no una iglesia enferma por quedarse acostada en la casa, una iglesia arriesgada que es capaz de irse a las fronteras, capaz de dialogar hasta con los no creyentes.
De la Cruz argumentó sobre la unión que existe entre las otras iglesias y la católica, afirmando que comparten la misma fe, “no somos iguales porque la diversidad es necesaria, estamos unidos pero compartimos diferentes miradas de como ver el mundo, si todos pensamos iguales fuera aburrido el mundo” dijo.
Inseguridad en RD
Con relación al tema de inseguridad ciudadana en el país aseveró que “nos sentimos inseguros de la seguridad porque no confiamos en los organismos que dicen cuidarnos”.
Agregó que el gobierno debe seguir poniendo esto como prioridad para mejorar la situación y que los ciudadanos tomen conciencia de que debemos cuidarnos.
El Sacerdote puntualizó que el callar un hecho delictivo es también convertirse en delincuente, “quiero hacer un llamado a toda la población aclarando que la seguridad es cuestión de todos, sino vamos a seguir viviendo en un país inseguro”.
Con respecto al tema haitiano manifestó que es lamentable la situación que viene arrastrando este país desde hace años, considera que la crisis de haití no es solamente una solución que está en Haití o en República Dominicana sino que es una situación que se debe abordar a nivel global, instando a las Naciones Unidas a poner mayor esfuerzo en este pueblo que sufre violencia, inseguridad y hambre.
