El presidente de Rusia, Vladímir Putin, llega a Crimea, que celebra este sábado el noveno aniversario de su anexión por Moscú.
El mandatario ruso ha estado en la Escuela de Arte y en el centro infantil Korsun en Quersoneso, en las afueras del puerto de Sebastopol, la principal base de la flota rusa en el mar Negro. Putin también visitó el yacimiento arqueológico de las ruinas de la antigua ciudad griega de Chersonesos, según los medios estatales rusos.
La visita se produce después de que la Corte Penal Internacional haya emitido una orden de detención por presuntos crímenes de guerra en Ucrania, contra el presidente ruso por la deportación ilegal de niños ucranianos, un paso sin precedentes, al ser la primera vez que este tribunal pide detener a un jefe de Estado aún en el ejercicio de su cargo.
Además lo hace en un día en el que se han producido explosiones en Sebastopol, Crimea. Fueron reportadas esta mañana por los canales locales de Telegram y la noticia fue retransmitida por los medios de comunicación ucranianos.
El gobernador de Sebastopol, Mikhail Razvozhayev, ha explicado en redes sociales que se trataba de un “entrenamiento militar” en uno de los sitios de la ciudad. Ayer el canal de Telegram Crimean Wind había informado de otra explosión en el distrito de Simferopolis, en Crimea, donde se encuentra la brigada de defensa costera de la flota rusa del Mar Negro.
La península de Crimea está bajo ocupación rusa desde 2014, tras un referéndum con el que Moscú pretendía anexionarse el territorio sin reconocimiento internacional.
Varios atentados en los últimos meses se han producido en la península ocupada por los rusos: en octubre, una potente explosión en el puente de Kerch que une Crimea con Rusia provocó el derrumbe de parte de la estructura. La autopista fue inaugurada en 2020 por el presidente Vladímir Putin.
