Putin asegura contar con “un arsenal suficiente” de municiones de racimo y recuerda que se reserva el derecho de utilizarlas en caso de que Ucrania haga uso de las suyas.
Rusia asegura haber impedido el ataque de las fuerzas ucranianas al puerto de Sebastopol, en el mar Negro.
A través de un mensaje de Telegram, el Ministerio de Defensa informó de la destrucción de siete drones aéreos y dos drones submarinos que pretendían atentar contra instalaciones en el territorio de la península de Crimea. Ucrania, de momento, no se ha pronunciado al respecto.
El que sí ha hablado, en su caso sobre las controvertidas bombas de racimo, ha sido el presidente Vladímir Putin, que ha asegurado contar con “un arsenal suficiente” de estas municiones, y que se reserva el derecho de utilizarlas en caso de que Ucrania haga uso de las suyas. El presidente también aclaró que, de momento, Rusia no ha utilizado estas armas en la actual guerra.
Una contraofensiva agotadora
Desde el otro bando, el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, destaca por su parte los resultados, lentos pero seguros, que está dando la contraofensiva, de la que quiso subrayar su carácter agotador. Un apoyo continuado de los aliados, ha recordado una vez más Zelenski, es esencial para el éxito de dicha contraofensiva.
Los combates se han intensificado en múltiples puntos a lo largo de los 1500 kilómetros de la línea del frente. Las fuerzas ucranianas avanzan con paso firme por los flancos norte y sur de la ciudad destruida de Bajmut, que las fuerzas rusas ocupan desde mayo.
También se están librando batallas a lo largo del frente sur en Zaporiyia, donde las fuerzas ucranianas están logrando avances mínimos.
