Los candidatos a senadores por el Distrito Nacional y la provincia de Santiago inician este lunes la jornada de debates que organiza la Asociación Nacional de Jóvenes Empresarios (ANJE) en colaboración con varias cadenas de medios de comunicación.
La jornada tendrá lugar en el auditorio Horacio Álvarez Saviñón de la Universidad Pedro Henríquez Ureña (UNPHU), en el horario de 8:00 p. m. a 10:00 p. m.
Los moderadores del debate senatorial del Distrito Nacional serán: Jéssica Hasbún y Jean Suriel. Y los del debate senatorial de Santiago serán: Addis Burgos y Félix Victorino.
Mientras que el martes, tendrá lugar el debate vicepresidencial y estará a cargo de los periodistas José P. Monegro y María Elena Núñez.
La tanda será concluida el miércoles 24 con el debate presidencial, contando como hecho inédito la participación de un presidente de la República.
Los conductores del debate presidencial serán: Roberto Cavada y Katherine Hernández.
Están invitados los candidatos de los partidos políticos que obtuvieron al menos el 5 % de los votos válidos en las elecciones presidenciales del 2020.
ANJE ya ha realizado otros debates en 1998, 2002, 2006, 2016 y 2020, a nivel congresual, municipal y presidencial aunque ninguno con la distinción de contar con un expresidente de la República y un presidente en ejercicio simultáneamente.
Apoyo instituciones
Para los debates a celebrarse, ANJE aseguró que cuenta con el apoyo de la Junta Central Electoral (JCE), además del respaldo de más de 30 gremios y asociaciones, así como de 6 reconocidas universidades del país.
La celebración de debates y la participación de los candidatos es sugerente en las leyes y no obligatorio. La realización de los mismos nace bajo la influencia de los Estados Unidos, país que logró en el tiempo instaurar la cultura del debate, pasando en su momento por las mismas etapas que los tales han tenido en la República Dominicana, que incluyen convocatorias no correspondidas y rechazos.
El debate más popular y hasta de culto realizado en Estados Unidos, ocurrió en 1960 enfrentando al presidente de ese entonces Richard Nixon y a John F. Kennedy.
Fue el primero en ser televisado y fue visto por un tercio de la población estadounidense. Aspectos como el color del traje, el maquillaje y el dominio de la cámara, incidieron en que Kennedy obtuviera ganancia de causa en un primer encuentro.