Los habitantes que aún residen en Bajmut, en Ucrania, luchan para sobrevivir en medio de los constantes bombardeos, invasiones de drones e intercambio de artillería.
El día a día en esta ciudad es cada vez más incierto, y son pocos los residentes que resisten, que han visto marchar a la mayoría de sus 75.000 habitantes.
La movilización de los frentes ha sido constante, y mientras tanto Kiev se encuentra a la espera del material bélico que les ha prometido Occidente.
Entrenamiento en el frente de Jerson
En Jerson los soldados ucranianos continúan con sus entrenamientos en la nieve e intentan concretar estrategias y posibles opciones para poder cruzar el río Dnipro, el cual se interpone entre ellos y los rusos.
Su objetivo es encontrar la manera de cruzarlos sin perder parte de su personal.
Refuerzos para ayudar a Ucrania
Los esfuerzos por ayudar a Ucrania en el campo armamentista, sigue siendo parte importante de las agendas políticas de varios países de Occidente.
“La semana pasada entregamos tanques y qué podemos prometer ahora. Lo he dicho en la Cámara de los Comunes, estoy muy abierto a examinar todo tipo de sistemas y no sólo jets para dar a Ucrania. Pero estas cosas no siempre ocurren de la noche a la mañana”, declaró Ben Wallace, secretario de Defensa británico.
Posible uso indebido de fondos
La policía ucraniana intenta limpiar la corrupción detectada en organismos que gestionan el dinero de la guerra y la ayuda a las víctimas.
Según la policía, entre los sospechosos estarían altos mandos de la región de Odesa, acusados de defraudar al Estados cerca de 175.000 euros.
Como parte de la estrategia de Ucrania para ingresar en la UE, el país pretende demostrar su capacidad para combatir la corrupción.