REDACCIÓN.- Los Ángeles Dodgers lograron un histórico triunfo en el Juego 3 de la Serie Mundial ante los Toronto Blue Jays, superándolos 6-5 en 18 entradas, en un partido que duró seis horas y 40 minutos, uno de los más largos en la historia del Clásico de Otoño.
El cuadrangular decisivo fue conectado por Freddie Freeman, dando la victoria a los Dodgers y la ventaja de 2-1 en la serie.
El Juego 4 se jugará con el japonés Shohei Ohtani en la loma para los Dodgers, enfrentando al ex ganador del Cy Young, Shane Bieber, de Toronto.
Los Blue Jays deberán recuperarse tras desaprovechar oportunidades en el maratónico Juego 3, además de lidiar con la posible ausencia de George Springer, quien sufrió molestias en oblicuo y músculo intercostal.
Bieber llega con una efectividad de 4.38 en tres aperturas de la postemporada y ha recibido al menos dos carreras en cada inicio.
Mientras tanto, Ohtani enfrentará un desafío físico tras su extraordinaria actuación el día anterior, en la que tuvo nueve turnos al bate, conectó dos cuadrangulares y dos dobles, produjo la mitad de las carreras de su equipo y recibió cinco bases por bolas.
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El manager de los Dodgers admitió sentirse emocionalmente desgastado, pero recalcó que no hay tiempo para descansar: “En unas horas hay que regresar a este parque de pelota a tratar de ganar otro partido que nos acerque a la meta”.
Por su parte, John Schneider, manager de Toronto, destacó la actuación de sus jugadores y señaló que deben “limpiar algunas cosas y venir a competir otra vez con todo lo que tenemos”.
El partido del lunes se convirtió en el segundo más largo en la historia de la Serie Mundial, solo detrás del Juego 3 de 2018 en el mismo estadio, que duró siete horas y 20 minutos. Los Dodgers enviaron 10 lanzadores en las 18 entradas, mientras que Ohtani se prepara para otra apertura decisiva.
