La alocución del canciller Roberto Álvarez, ante la ONU sobre las deportaciones masivas, genera críticas ante la realidad que se vive en la República Dominicana.
Sectores nacionalistas y de la Mesa de las migraciones alegan que, el discurso del ministro de Relaciones Exteriores está muy lejos de la realidad, al denunciar una mafia que opera en la zona limítrofe para traficar con extranjeros ilegales.
Para el presidente del Instituto Duartiano Wilson Gómez, la alocución del canciller Roberto Álvarez ante la ONU está muy distante de la realidad que se vive en el país.
Gómez calificó de preocupante que, miles de extranjeros ilegales estén amontonados en los lugares públicos del país, como son establecimientos comerciales, plazas, escuelas y hospitales.
Una reacción similar a la del presidente del Instituto Duartiano, fue la del representante de la Mesa Nacional de la Migración, William Champentier, quien, al referirse al tema de las repatriaciones enfatizó que, durante años ha recibido denuncias de nacionales haitianos, sobre la mafia que opera en la frontera, lo cual pone en tela de juicio a las autoridades.
Tanto Gómez como Champentier afirman que, la frontera se ha convertido en un negocio por la que miles de ilegales haitianos ingresan al país.
El Instituto Duartiano y la Mesa para la Migración, apuestan para que, haya una frontera controlada en su totalidad, mejorando las condiciones de vidas de los que están llamados a salvaguardarla, a fin de evitar que, extranjeros ilegales sigan burlando los controles y chequeos militares.
