Durante más de una hora, alrededor de 300 moradores y productores de las comunidades impactadas por la construcción de la Presa de Monte Grande, se alinearon a ambos lados de la carretera en la comunidad de Las Minas, ubicada en la carretera Azua-Barahona.
En la actividad, los manifestantes enarbolaron pancartas y cartelones en los que reclaman el cumplimiento de los acuerdos contraídos por el presidente Luís Abinader, quien se comprometió públicamente a entregar los títulos de las tierras y a asentar a los campesinos en sus parcelas, el mismo día en que se inaugurara la presa, lo cual no cumplió, sometiendo a las familias desalojadas a vivir en la desesperación, el hambre y la incertidumbre, y a un largo peregrinar de lucha exigiendo lo que en derecho le corresponde.
Al término de la actividad, se realizó una asamblea de evaluación, en la que el padre Rudy Lara, representante del Obispo de la Diócesis de Barahona, la calificó como todo un éxito y exhortó a los presentes a redoblar la lucha, tomar las calles, haciendo más fuertes las próximas actividades, como única forma de poder vencer la injusta y tozuda actitud del gobierno y sus funcionarios y hacer cumplir los derechos que les corresponden.
La próxima actividad tendrá lugar el viernes 26 de abril, a las 3 de la tarde, en la recién inaugurada escuela de Monte Grande.
Mientras, una comisión integrada por los principales líderes de los Comités de Protección y Defensa de las comunidades desalojadas, el padre Lara y los representantes de las organizaciones que forman parte del Comité de Seguimiento de los Acuerdos, acudirá de nuevo al Palacio Nacional a reunirse con el ministro de la presidencia Joel Santos, para conocer las respuestas del gobierno a las exigencias y propuestas de los comunitarios para poner fin al viacrucis impuesto por sus constantes y abusivos incumplimientos.
