BEIJING (AP) — El ministro francés de Asuntos Exteriores, Jean-Noël Barrot, comenzó el jueves una visita de dos días a China y mantuvo conversaciones con su homólogo chino sobre Ucrania y las arraigadas disputas comerciales entre China y Europa. No se informó de ningún progreso inmediato, pero ambas partes se mostraron positivas sobre el estado de las relaciones.
Barrot se reunió con el ministro chino de Exteriores, Wang Yi, quien dijo en una conferencia de prensa posterior que ambos países deberían “elegir el multilateralismo sobre el unilateralismo… y buscar beneficios mutuos y resultados en los que todos ganen en lugar de la desvinculación y el aislamiento”. Esto reflejó el lenguaje frecuentemente utilizado por China al criticar la política exterior de Estados Unidos y el orden político liderado por Occidente.
Más tarde, Barrot se reunió con el primer ministro Li Qiang, quien afirmó: “Como todos sabemos, el mundo actualmente no es pacífico, y la inestabilidad y la incertidumbre están aumentando”.
“Como dos grandes países independientes y responsables, China y Francia deberían fortalecer la cooperación. A través de nuestra cooperación, deberíamos inyectar más certeza en las relaciones bilaterales y en el mundo”, dijo Li.
Barrot respondió que el mundo estaba “efectivamente atravesando tiempos difíciles donde varios principios importantes, particularmente los del multilateralismo, están siendo sacudidos”.
“En este contexto, una nueva Europa está emergiendo rápidamente, teniendo como única brújula la autonomía estratégica. Esta nueva Europa está invirtiendo masivamente en su defensa, en energía”, dijo el ministro antes de que los reporteros fueran escoltados fuera de la sala.
El viernes, Barrot viajará a Shanghái para reunirse con funcionarios locales y líderes empresariales. Francia ha sido un firme defensor de Ucrania en su lucha contra la invasión de Rusia, mientras que Beijing ha respaldado diplomáticamente a Rusia y ha proporcionado un salvavidas económico comprando recursos naturales rusos. La visita de Barrot es una oportunidad para evaluar la actitud de China sobre Ucrania antes de una importante reunión organizada por Francia sobre una posible fuerza de paz para el país.