La Fundación Institucionalidad y Justicia, Inc. (Finjus) ha manifestado su preocupación ante el reciente acuerdo entre el Ministerio de Educación y la Asociación Dominicana de Profesores (ADP), que reduce del 70% al 65% la calificación mínima necesaria para que los docentes reciban un aumento salarial del 7%. La institución considera que esta decisión representa “un grave error” que podría perjudicar el sistema educativo nacional.
A través de un comunicado, Finjus expresó que esta medida “contraviene los principios de razonabilidad que deben prevalecer para garantizar el derecho constitucional a la educación de calidad”. Además, la Fundación señaló que, a pesar de la asignación del 4% del Producto Interno Bruto (PIB) a la educación preuniversitaria, la calidad educativa sigue siendo deficiente, subrayando que “destinar fondos no es la única solución”.
Si bien Finjus reconoce la legitimidad de las demandas de los docentes, sostiene que la prioridad debe ser la mejora en la calidad de la educación. “Es inaceptable que, como Estado, sigamos ocupando los últimos lugares en los rankings internacionales de evaluación estudiantil y docente, y aún así, se consienta esta práctica equivocada”, señala el comunicado.
Impacto en la Desigualdad Educativa
La Fundación también alertó que el acuerdo afectará negativamente el rendimiento académico de los estudiantes, lo que podría profundizar aún más la brecha entre los alumnos de las escuelas públicas y privadas. Finjus hizo un llamado a las autoridades pertinentes para que evalúen la efectividad de las políticas implementadas y consideren la incorporación de normativas que permitan un análisis más exhaustivo de los parámetros educativos.
Un Llamado a Priorizar la Calidad Educativa
Finjus concluyó que “los vicios persistentes en el sector educativo están poniendo en riesgo los logros sociales e institucionales que el país ha alcanzado”, y enfatizó la necesidad de priorizar un desarrollo integral del sistema educativo para garantizar los derechos de los niños, niñas y adolescentes.
El comunicado finalizó subrayando la importancia de implementar reglamentaciones internas que permitan una evaluación profunda de los estándares educativos. “Solo de esta manera se podrá evitar la desmejora continua del sistema educativo y garantizar un futuro próspero para las nuevas generaciones”, concluyó Finjus.