El Gobierno dominicano puso en marcha el Bono de Emergencia en respuesta a la trágica explosión que sacudió el municipio de San Cristóbal el pasado 14 de agosto, que dejó 37 muertos y 59 heridos.
La iniciativa, implementada conjuntamente por el Programa Supérate, el Sistema Único de Beneficiarios (Siuben) y la Administradora de Subsidios Sociales (Adess), fue anunciada hoy por Wailly Lewis, subdirector de protección social de Supérate, y tiene como objetivo brindar apoyo inmediato a las familias afectadas, consistiendo en una transferencia monetaria no condicionada de 20,000 pesos.
“Estamos aquí para hacer el anuncio formal de que el próximo martes, de 147 personas que se tienen identificadas, ya hay 24 que fueron validadas por el Siuben para comenzar a recibir un apoyo a través de Supérate con el Bono de Emergencia”, dijo Lewis.
Agregó: “Esto no va a reponer la carga emocional y el dolor que esto ha traído a sus vidas, pero todas las instituciones del gobierno están trabajando para ayudar a que cada uno de ustedes se levanten, y a partir de ahora sean entes más productivos”.
Banreservas
Informó que el próximo martes, de las 24 personas que han sido verificadas 22 recibirán en sus celulares un mensaje de remesas Banreservas para que pasen a hacer su retiro, mientras que otras dos personas recibirán los fondos a través de un cheque, que será retirado en la oficina de la Gobernación.
En una nota de prensa se agrega que el ministro de la Presidencia, Joel Santos, dijo a los cristobalenses: “Para que ustedes puedan continuar, el gobierno los acompaña, para ver cómo poco a poco vamos superando esta situación”.
El Comité de Emergencia de Supérate (CES), liderado por Gloria Reyes, ha anunciado que 147 personas serán beneficiarias del Bono de Emergencia, de las cuales 24 ya han completado el proceso de verificación y validación a través del Siuben. Estas personas incluyen a aquellos que resultaron heridos en la explosión, familiares de las víctimas fallecidas y empleados de negocios ubicados en la zona cero, que sufrieron pérdidas irreparables.