Redacción. El presidente ecuatoriano, Guillermo Lasso, informó el sábado sobre la autorización del porte y tenencia de armas para civiles bajo el uso de defensa personal debido a un aumento de la inseguridad en el país.
Asimismo, anunció un estado de excepción en Guayaquil y sus alrededores, que impone un toque de queda nocturno desde la 1:00 de la madrugada debido al alza de la delincuencia en la ciudad costera.
“Ecuatorianos, tenemos un enemigo común: la delincuencia, el narcotráfico y el crimen organizado”, dijo el presidente de Ecuador.
Cruzada bajo el temor
La llamada “cruzada por la seguridad” fue tomada como una respuesta a eventos de escándalos sucedidos en el país. El día anterior a su aprobación, un hombre fue víctima del uso forzoso de un chaleco cargado de explosivos en Guayaquil. La angustia estuvo presente durante varias horas hasta que la policía pudo retirárselos y desactivarlos.
“Los guardias de seguridad privada apoyarán a la policía nacional en las tareas de vigilancia y seguridad portando sus armas en los alrededores de sus puestos de trabajo”, agregó Lasso. “Siento como ustedes la preocupación por la inseguridad; para el gobierno ecuatoriano, su paz y tranquilidad son vitales”, aseguró. Por el momento, se prohíbe, en paralelo, la fabricación y porte de armas artesanales.
En Guayaquil, el trimestre culminó con 555 homicidios intencionales, según cifras del ministerio de Gobierno. Lasso afirmó haber reforzado el personal policial con 130 vehículos repotenciados (rehabilitados) y 400 agentes nuevos.
Desde los inicios de su mandato en mayo de 2021, el gobierno de Guillermo Lasso ha utilizado las declaraciones de excepción en distintas ocasiones en respuesta a ataques y al incremento de violencia.
