Ucrania y Rusia han estado intercambiando importantes ataques con drones y misiles, cada uno buscando obtener una ventaja a medida que se acerca la investidura del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump.
El líder estadounidense entrante se ha comprometido a poner fin rápidamente a los combates, pero ha dado pocos detalles sobre cómo lo lograría y su llegada a la Casa Blanca genera gran incertidumbre sobre una invasión rusa en toda regla que está a punto de entrar en su cuarto año.
Durante la noche del lunes al martes, Kyiv llevó a cabo lo que dijo fue su ataque “a mayor escala” del conflicto hasta el momento, atacando profundamente dentro de Rusia con drones y misiles, incluidos seis misiles balísticos ATACMS de largo alcance, de fabricación estadounidense, dijeron funcionarios ucranianos y rusos.
El presidente saliente de Estados Unidos, Joe Biden, dio luz verde a Ucrania para que usara misiles estadounidenses de largo alcance para atacar dentro de Rusia en noviembre del año pasado, algo que Moscú ve como una escalada importante.
Moscú ya había advertido que el uso de misiles balísticos de ataque aéreo se enfrentaría al lanzamiento de una nueva arma rusa, un misil balístico hipersónico de alcance intermedio conocido como Oreshnik. El misil solo se había disparado una vez antes, el 21 de noviembre.
Las Fuerzas Armadas ucranianas dijeron que las instalaciones militares y petroleras rusas fueron el objetivo de su último bombardeo, y agregó que tales ataques continuarían “hasta que se detenga por completo la agresión armada de la Federación Rusa contra Ucrania”.
Rusia lanzó su propio bombardeo contra Ucrania durante la noche hasta este miércoles, principalmente contra el asediado sector energético de Ucrania.
Según el presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, los ataques nocturnos involucraron más de 40 misiles, de los cuales 30 fueron destruidos. También participaron más de 70 drones de ataque rusos.
“Otro ataque ruso a gran escala. Estamos en pleno invierno y el objetivo de los rusos sigue siendo el mismo: nuestro sector energético”, dijo Zelensky en un comunicado este miércoles.
“Los objetivos incluyen infraestructura de gas e instalaciones energéticas que garantizan la vida normal de las personas”.
El ataque obligó a la empresa estatal de energía de Ucrania, Ukrenergo, a cortar temporalmente el suministro eléctrico, una medida que toma para evitar el colapso del sistema energético. El suministro eléctrico se restableció a las 9 a.m. hora local de este miércoles, según informó la empresa.
Rusia ha atacado repetidamente la infraestructura energética de Ucrania durante los meses fríos de invierno, obligando al país a implementar cortes de energía de emergencia.
El aumento de los ataques se produce en el período previo a la investidura de Trump, el 20 de enero.
Puede leer: Ucrania golpea a Rusia en un “importante” ataque con drones y misiles