Santo Domingo.-La renuncia de Carlos Pimentel a la designación como director general de la Alianzas Público-Privadas (DGAPP) resuelve el conflicto legal de dirigir dos instituciones, pero plantea otra situación para el funcionario, debido a que al decir quedarse en la Dirección General de Contrataciones Públicas (DGCP) tendrá que hacerlo sin percibir salario.
Esto porque así lo establece de forma taxativa el decreto 614-24 que lo encargó de las dos instituciones, pero solo cobrando en la DGAPP, que fue de la que renunció.
En el párrafo dos del artículo I del citado decreto se establece “se modifica el artículo 8 del Decreto núm. 329-20, que designó a Carlos Pimentel Florenzán como director general de la Dirección General de Contrataciones Públicas para que en lo adelante estas funciones sean desempeñadas a título honorífico”.
Para hacer posible que Pimentel vuelva a cobrar por el desempeño de sus funciones como director general de la DGCP, deberá modificarse el decreto.
La designación de Carlos Pimentel como director de la DGAPP en adición de sus funciones como director general de la DGCP provocó un escaseo jurídico porque violaba varias leyes, en especifico la 47-20, que establece que el titular de esa dependencia pública no puede ejercer otro puesto, que no sea la docencia.
Los juristas, políticos e instituciones de la sociedad civil que cuestionaron el nombramiento, aseguran que también violentaba las leyes 41-08 de Función Pública y la 340-06 que dio origen a la DGCP.
Las críticas finalmente terminaron llevando a Carlos Pimentel a renunciar a una de las dos instituciones y lo hizo a la DGAPP, la única en la que percibiría salario.
