Todo el mundo, en algún momento de su vida, ha tenido problemas para dormir. Lo malo es cuando esos problemas se convierten en rutina y limitan las horas de sueño.
Hay recomendaciones, hábitos y trucos que pueden ayudar a combatir el insomnio ocasional. Si se convierte en un problema crónico, hay que acudir a un especialista.
Móvil fuera
Evita el móvil o cualquier dispositivo electrónico 30 minutos antes de dormir, así conseguirás una relajación más sencilla y rápida.
En la cama, a dormir
La cama es para dormir. Si en 20 minutos no te has dormido, levántate, da un paseo, despéjate… Pero si te quedas en la cama, sólo incrementarás la ansiedad.
Horarios pre y post sueño
Imponte unos horarios y respétalos. No sólo para acostarte, sino también para levantarte.
Mente sana y cuerpo sano
Haz ejercicio. Un mínimo de 30 minutos al día es ideal para reducir energía y conciliar mejor el sueño.
Ni comer, ni beber
No comas ni bebas, al menos, dos horas antes de irte a dormir pues la digestión se te puede hacer muy larga y pesada.
Prohibido el picante
Y si cenas, que no sea una cena pesada o picante. Obviamente, tampoco te acuestes con hambre, pues no es la solución.
¿Medicación? Al médico
Si necesitas algún suplemento o somnífero para poder dormir, no hay problema para tomarlo. Eso sí, siempre bajo prescripción médica.
¿Qué más da la hora?
Si te despiertas en mitad de la noche, no mires la hora, cambia de postura y vuelve a dormir.
Elige tu propio ritual
Crea un ritual para dormir. Puede ser un vaso de leche, una manzanilla, leer un libro, un baño… Algo que tu mente ya asocié a un sueño posterior.
¿Alimentos para dormir mejor? Por supuesto
Hay una serie de alimentos que, si tomas a menudo, te ayudarán a conciliar el sueño y dormir mejor. Desde plátanos, leche y huevos, a soja, frutos secos y pescado azul.
Invierte en tu salud
Un colchón puede durar unos 10 años, por lo que merece la pena invertir en él y buscar uno que se adapte a tus gustos. Lo mismo pasa con la almohada, prueba las que necesites hasta dar con la tuya.