Euronews.-Tanto rusos como ucranianos temen que a medida que pasen los días y baje el nivel del agua vaya aumentando el número de fallecidos.
Moscú también ha hecho públicos sus datos sobre lo ocurrido: la cifra oficial para Rusia es de ocho muertos, si bien muchos voluntarios de los rescates hablan de decenas.
Y es que tanto rusos como ucranianos tienen claro que a medida que pasen los días y vaya bajando el nivel del agua, vaya subiendo el número de víctimas mortales.
La guerra, mientras tanto, continúa, dentro y fuera de las zonas inundadas, y también fuera de las fronteras de Ucrania. Este viernes, un dron alcanzaba un edificio residencial de la ciudad rusa de Vorónezh, a unos 300 kilómetros de la frontera, dejando al menos tres personas heridas.